La cura masiva de Boston

Boston, una importante ciudad estadounidense desde los días coloniales de la nación, recientemente es conocida como un centro académico y científico. Cuarenta instituciones educativas, entre ellas la prestigiosa Universidad de Harvard y el Instituto Tecnológico de Massachusetts, tienen su sede en el área metropolitana.

La Red Ministerial del Sur de Nueva Inglaterrra de las Asambleas de Dios (SNE), dirigida por el Superintendente Nick W. Fatato, se ha embarcado en una estrategia metódica e intencional para lanzar un esfuerzo renovado de expandir los Ministerios Universitarios Chi Alpha en la región. Fatato, de 63 años, afirma que la investigación, el reclutamiento, y la dotación son los principios generales del esfuerzo. No cree que la propuesta de Boston — la capital de Massachusetts, y la ciudad más grande de Nueva Inglaterra — sea demasiada enorme.

"A Dios no le intimida la inmensidad de Boston," dice Fatato. "Hay un cuarto de millón de estudiantes y en cuatro años habrá otro cuarto millón. La estrategia misional para alcanzar esta población por su impacto en nuestra región y en todo el mundo exige una adopción grande y visionaria."

Hasta ahora, 30 miembros del equipo Chi Alpha se han alineado para formar parte de la tarea. Seis ya se han trasladado a la región de Boston.

Fatato, que trabajó por 20 años en Chi Alpha, creía desde hacía tiempo que la Iglesia descuidaba dos lugares claves en Estados Unidos: las áreas metropolitanas y los campus universitarios seculares. Fatato trabajó como el primer representante del campo nacional residente de Chi Alpha. Hace tres décadas, para modelar la plantación del primer objetivo nacional de la universidad urbana, Fatato se trasladó a Boston con un equipo de seis personas.

Su visión se ha mantenido firme. Incluso antes de su elección como superintendente del SNE hace tres años, Fatato dirigió los esfuerzos para situar a Chi Alpha en una posición estratégica en la región. Se relacionó con tres veteranos líderes de Chi Alpha que supervisan grandes equipos en las escuelas donde ejercen su ministerio: El misionero estadounidense Anthony Saladino en la Universidad Virginia Tech; el misionero estadounidense Matt Carpenter en la Universidad Central de Arkansas (UCA); y el misionero estadounidense Eli Gautreaux, líder de Texas Chi Alpha que construyó el capítulo en la Universidad Estatal Sam Houston (SHSU).

El trío de directores envía equipos y ayuda a dirigir la visión. Se reúnen periódicamente con Fatato en persona o por teleconferencia.

MOVIMIENTOS MISIONEROS
El equipo de plantación incluye a los misioneros estadounidenses C.S. y Faith Robinson, de etnia india.

"Los Robinson aportan años de experiencia y una profunda pasión por el trabajo en Boston," afirma Fatato. "Están bien posicionados para ayudar a liderar."

Anteriormente, el personal de SHSU se mudó al vecindario Mission Hill de Boston, que tiene siete universidades en un radio de una milla. Con el tiempo, los miembros del equipo de apoyo y los Robinson esperan llegar a todas las escuelas. La más grande es la Universidad Northeastern, una escuela privada de investigación que cuenta con más de 2,100 estudiantes de la India.

Dado que obtener acceso al espacio público en las instituciones privadas puede ser un desafío, los Robinson, que son ministros de las AD de 40 años y ordenados, adoptan un enfoque evangelístico de estilo de vida.

"Muchos estudiantes viven en los apartamentos del barrio que técnicamente no tenemos que ir al campus para llegar a ellos," dice C.S, nacido y criado en la India. "La proximidad y el acceso están ahí, así que podemos formar relaciones."

"Vemos toneladas de oportunidades para conectarnos," dice Faith, que creció en una iglesia pentecostal en Houston. "Boston es una ciudad diversa con estudiantes de todo el mundo."

C.S., también criado en el pentecostalismo, obtuvo un máster en el New India Bible Seminary de Kerala y emigró a los Estados Unidos en el 2008, el mismo año en que se casó con Faith en un matrimonio arreglado.

Los Robinson respondieron al atractivo de Fatato hacia los trabajadores de Chi Alpha en el 2019 después de una visita a varios campuses de Boston.

"Era una ciudad llena de estudiantes y jóvenes profesionales," recuerda C.S. "En una salida de 10 minutos, escuché 7 idiomas hablantes. Estaba abrumado."

Su objetivo inmediato es establecer líderes de grupos pequeños que puedan formar relaciones de vecindad.

Faith obtuvo una licenciatura en educación en SHSU y C.S. obtuvo un segundo máster en la escuela de Huntsville, este en sociología.

"Chi Alpha profundizó mi fe y me quedé abierto a la idea de una carrera ministerial," dice Faith, que dio un año como asociada misionera en los Países Bajos después de la graduación.

A pesar de ser hijo de pastor, al principio C.S. no esperaba dedicarse al ministerio. Estaba cansado durante la infancia y juventud, en tal medida que tenía dificultades para mantener a sus amigos. Después de rendir su vida al Señor a los 21 años, dice que Dios le curó de su impedimento para hablar.

Posteriormente, Hechos 18:9-10 se convirtió en su versículo de apoyo fundamental en los alcances de Boston. El pasaje cuenta la seguridad de visión del Señor al apóstol Pablo para seguir reclamando el evangelio y no temer que se dañe.

"Jesús tiene mucha gente aquí en la ciudad que Él quiere levantar para Él," dice Faith. “Estamos buscando al pueblo de Dios — que puede que aún no sea realmente el pueblo de Dios.”

Además del traslado de los Robinson a Boston, los misioneros estadounidenses Michael y Rebekah Quinn se han trasladado a Cambridge desde la UCA; el misionero estadounidense asociado Steven Longoria y su esposa, Alexandra, de la Universidad de Stanford Chi Alpha están terminando unas prácticas en la Universidad de Yale; y el misionero estadounidense Nick Huber se ha trasladado desde Virginia Tech.

PHOTO: Faith y C.S. Robinson se encuentran entre los que han respondido al llamado para plantar capítulos de Chi Alpha en el área de Boston.