Cuba cumple antiguas profecías de décadas pasadas.

Los misioneros de AGWM Don y Jacquie* recientemente terminaron de entrenar a 300 trabajadores para las misiones globales cubanas, 80 de los cuales fueron comisionados para el servicio mundial en el Concilio General de las Asambleas de Dios de Cuba este año.

"Donde quiera que vamos, nace una visión para las misiones en esta nación," dice Don. “Jacquie y yo hemos viajado esta isla de extremo a extremo varias veces. No hay un lugar al que vamos que no veamos a Dios despertando una carga para las misiones. La iglesia está explotando.”

UNA PALABRA PROFETICA

En 1983, una mujer llamada Pastora María se puso de pie en una pequeña iglesia en Camagüey, Cuba y emitió esta profecía:La iglesia cubana será una luz para las naciones.

Sus palabras, guiadas por el Espíritu Santo, llevaron a las personas más a la esperanza que a la acción inmediata — en ese momento, el país estaba clausurado para viajes internacionales.

Treinta años después, en el 2013, Cuba aprobó una norma que permite a los ciudadanos obtener visas de dos años para viajes internacionales. La iglesia cubana vio esto como el comienzo de la profecía cumplida.

En 2014, el superintendente y asistente general cubano de las AD y sus esposas tuvieron el primer diálogo con el personal de AGWM sobre el lanzamiento de una fuerza misionera desde Cuba a las naciones. Esta conversación tuvo lugar en un hotel en Camagüey — el pueblo donde la Pastora María había dado su profecía. Esa misma semana, las AD cubana celebró su primera convención de misiones en la iglesia de Camagüey, y más de 100 personas respondieron.

En 2015, el Concilio General de Cuba aprobó por unanimidad el establecimiento de un departamento de misiones. Desde entonces, AGWM y Cuba han disfrutado de una asociación en misiones foráneas que está lanzando a Cuba a los confines de la tierra.

UNA HISTORIA DEL TIEMPO PERFECTO

En el proceso de capacitar a los candidatos para las misiones, Don y Jacquie descubrieron una gran cantidad de cubanos altamente calificados.

"Conocemos ingenieros químicos, profesores de inglés, abogados, médicos y más que están siendo llamados para ir a las naciones," comparten.

La cultura cubana otorga una alta importancia a la educación, y este valor cultural se refleja en la iglesia. La formación profesional de los cubanos los equipa estratégicamente para llegar a contextos sensibles.


Y por primera vez en más de 50 años, a los cubanos ahora se les permite salir del país por dos años a la vez, brindándoles la primera oportunidad oficial a estos misioneros cubanos excepcionalmente dotados y altamente equipados a salir del pais.

"Es como si Dios acabara de entrenar una gran fuerza misionera en los últimos 60 años," afirman Don y Jacquie.

En la convención de misiones de este año en el Concilio General de Cuba, Don proclamó que pronto, personas en muchos países del mundo escucharán de Jesús por primera vez y oirán de Él de personas con acento cubano.

Las 80 personas comisionadas en el servicio de misiones del Concilio General fueron los primeros frutos del programa de capacitación en relación a la misión eclesial recién aceptada de enviar a su gente.

“Este servicio demostró que las misiones mundiales son una prioridad de la iglesia cubana. Eso es lo que fue tan poderoso — fue una representación visual de enviarlos,” comenta Don. "Fue uno de los servicios más poderosos donde he estado."

EN CASA Y A HASTA LO ULTIMO DE LA TIERRA

El enfoque de la iglesia cubana en la expansión global no ha salido del hogar sin un testigo.

"Los cubanos son increíbles plantadores de iglesias," dice Don. “Justo antes de Semana Santa, habían 9,900 iglesias plantadas en su país. Durante la primavera llegaron a 10,000.”

Y no son solo los hombres cubanos quienes componen la fuerza de la plantación de iglesias. Las mujeres también son pioneras y sirven como pastoras principales.

"Los hombres y mujeres comisionadas en el Concilio General de este año fueron parte del cumplimiento de la profecía de la Pastora María," dice Don. "Ya no estamos hablando de un distrito de Cuba, estamos hablando de todo el país."

"Nada ha cambiado en sus circunstancias," explica Jacquie. “Lo que ha cambiado es la dirección de sus corazones. Siempre han sabido que Dios es grande y Dios es grande, pero ahora están viendo que habrá provisión no solo para su pan de cada día, sino también para la proclamación del evangelio y el envío de ese evangelio a otras naciones."

Desde los confines de Cuba hasta los confines de la tierra, los cubanos están llegando a los perdidos, plantando iglesias, capacitando a trabajadores globales y sirviendo a los pobres y a los que sufren.

"Ha habido grandes desafíos, pero estos son desafíos de Dios," concluye Don. “Los cubanos se levantan y dicen: 'Podemos hacer esto. ¡Sí podemos hacer esto!'”

Para obtener más información sobre el movimiento de plantación de iglesias y misiones en Cuba, lea la próxima revista WorldView en septiembre del 2019.



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