Natividad en vivo une a la comunidad de la iglesia

La Asamblea de Dios Hope Crossingsen la pequeña comunidad de Jefferson, Georgia, generalmente tiene una congregación de alrededor de 125 personas, aunque cuatro veces al año puede agregar uno que otro burro poco obstinado, algunas ovejas y un par de llamas (llamas disfrazadas de camellos) en la cuenta.

En el 2010, bajo la guía de los pastores Chris y Lisa Stephens, la iglesia comenzó a ofrecer a su comunidad, una natividad en vivo, con múltiples presentaciones de 20 minutos en diciembre. La idea de una natividad en vivo surgió por primera vez cuando una maestra de jardín de infantes mencionó que cuando le preguntó a su clase de qué se trataba la Navidad, solo un niño respondió con "Jesús."

"Necesitábamos hacer algo al respecto," dice Chris Stephens. "Necesitábamos presentar a Jesús de una manera que un niño pudiera entender." Y así nació la natividad en vivo.

La historia de la natividad que los hermanos de Hope Crossings comparten con las visitas, proviene de la perspectiva de un niño que está construyendo un comedero para animales para luego mostrar a sus amigos y familiares al día siguiente lo que Jesús necesita.

Aunque el propósito de la natividad es compartir el verdadero significado de la navidad con los niños y la comunidad, Stephens dice que ha habido algunos inesperados, e incluso sorprendentes
beneficios que han dado resultado.

"Cuando comenzamos originalmente, yo era básicamente quien cuidaba a los animales vivos, recogiéndolos con un camión y un remolque, y dejándolos que se quedaran en el pasto," dice Stephens. "Entonces, hubo un año, en que el burro decidió que no quería ir a ningún lado — tenía una soga para dirigirlo y simplemente no quería salir del pasto."

Buscando evitar esa frustración en el futuro, contactó a un asesor de FFA (Future Farmers of America) de la escuela local. La FFA no solo quería ayudar, sino que se ofreció a alojar, alimentar y entregar los animales a la iglesia para cada presentación y luego devolverlos a su establo.

Con el deseo de que la comunidad se involucrara aún mas en el evento, Stephens hizo otra llamada a la escuela; esta vez, al maestro del coro.

"Les pregunté si el coro estaría dispuesto a venir y cantar algunas canciones de navidad por unos 10 minutos antes de cada presentación — ¡ellos aceptaron!" dice Stephens. "Ahora, tenemos familiares, padres y abuelos que vienen a ver a sus hijos cantar y se quedan para el programa de natividad en vivo."

Este año La natividad en vivo tiene un elenco de 18 actores y actrices rotativos de la iglesia, que actúan dos veces por noche, en cuatro noches diferentes (13-15, 18 de diciembre). Pero no solo se está utilizando el talento para actuar — se necesitan muchos otros miembros de la iglesia para que la presentación sea un éxito.

"Además de los actores," dice Stephens, "tenemos personas que preparan tres estructuras diferentes para la producción, colocando alrededor de 140 fardos de heno (para sentarse), personas que dirigen el tráfico, personas que saludan, personas que hacen y distribuyen chocolate caliente y galletas, técnicos de luz y sonido, así como personas vestidas de negro para mover los escenarios según sea necesario."

Con tantos involucrados en la producción, Stephens dice que el esfuerzo ha ayudado a unir a la iglesia, creando camaradería de generación en generación. También señala que la generosidad de la escuela y las empresas dentro de la comunidad ha sido parte del éxito de la natividad.

Al principio, uno de los ancianos de la iglesia no estaba entusiasmado con la idea de la natividad, pero cuando vio cómo afectaba a las personas, se convirtió en uno de sus mayores partidarios.

“Una de las cosas que Dios le reveló fue cómo los años actúan como aislamiento... y hay más de 2,000 años de aislamiento entre el nacimiento de Cristo y las personas hoy en día," dice Stephens,"pero a través de una natividad en vivo, el aislamiento se elimina y es como estar allí — afecta la vida de las personas."

Desde el 2010, la asistencia ha crecido constantemente, comenzando con alrededor de 400 en su primer año hasta alrededor de 1,500 el año pasado.

Un visitante publicó en la página de Facebook de la producción: “Una tradición familiar para nosotros. La historia está bien contada. ¡El acompañamiento musical es genial! ¡Los animales vivos! ¡No querrás perderte esto! ¡Trae cobijas para sentarte mientras bebes chocolate caliente!”

Aunque la iglesia inicialmente no vio un aumento en la asistencia debido a La Natividad en Vivo, en los últimos años la gente ha comenzado a buscar la iglesia y a asistir debido a su exposición a la iglesia a través del programa anual.

"Ahora somos conocidos en todo Jefferson y el condado, como la Iglesia de la Natividad en vivo," dice Stephens con una sonrisa, "y eso está bien para mí."