ASAMBLEAS DE DIOS
Él es Christian
Todos en el grupo de jóvenes de Central Assembly en Springfield, Missouri, conocen a Christian y lo aman. ¿Por qué?
¿Quizás sea su peculiar y contagiosa sonrisa o sus brillantes espejuelos verdes debajo de un montón impresionante de cabello castaño ondulado? ¿Quizás sea su estructura física que no intimida? ¿O podría ser que si llegan algunos visitantes y no conocen a nadie en el grupo, Christian probablemente será la primera persona en acercarse decir «hola» y presentarse»?
Hay muchas razones por las que Christian es tan querido, pero quizás más que nada, es que él hace honor a su nombre [Cristiano en español].
«Es muy cariñoso y siempre muy amigable», dice Josh Seaman, pastor de Ministerios familiares en Central. «Él hace que todos se sientan acogidos y bienvenidos».
Pero ese no siempre ha sido el caso.
EL COMIENZO
Christian tiene autismo. En sus primeros años de adolescencia, tuvo muchas emociones negativas y frustraciones que se expresaban de diversas maneras negativas, como gritos, insultos y malas palabras, así como un comportamiento destructivo.
El comportamiento de Christian no facilitó las cosas a las personas que lo rodeaban y le costó entenderse a sí mismo o cómo lidiar con su ira y amargura.
«Tuve problemas de mala conducta», admite Christian en voz baja.
Pero en 2019, cuando Christian tenía 15 años, le regalaron su primera Biblia.
DECISIÓN POR CRISTO
La lectura de la Biblia ayuda a Christian a concentrarse y lidiar con situaciones externas, ya que sus sentidos pueden sobre estimularse en entornos públicos activos. Pero, afirma con frecuencia, que le gusta su Biblia.
«Mi madre (adoptiva) me regaló un cuaderno de oraciones», dice Christian. «Me encanta leer la Biblia; te sientes tan bien después de leerla, te sientes renovado. . . ¡Te sientes tan bien!
En 2020, después de leer su Biblia durante meses, Christian decidió aceptar a Cristo como su Salvador personal durante un servicio en la iglesia.
Aunque sonaría muy romántico decir que la lucha de Christian con los arrebatos y las malas palabras terminó en el momento en que entregó su vida a Cristo, no fue así como sucedieron las cosas. Al igual que muchos, la decisión de Christian simplemente marcó el primer día de su recorrido cristiano hacia la madurez espiritual.
VIDA CAMBIADA
En 2021, la madre adoptiva de Christian se dio cuenta de que él necesitaba un nivel de atención diferente al que ella podía brindar. Se determinó que Emily y Kevin Styles deberían convertirse en la familia anfitriona de Christian.
La familia Styles, que considera que su ministerio es trabajar con niños que han tenido experiencias difíciles en la vida, ha participado en este tipo de ministerio durante 15 años.
«Cuando Christian vino a vivir con nosotros por primera vez, tuvo que resolver algunas cosas», dice Emily. «Se enojaba y tenía que lidiar con los celos, pero cada vez que empezaba a luchar con algo, le recordábamos que se lo entregara a Jesús».
Al trasladarse para vivir con la familia Styles se produjo una transición a una nueva iglesia, Central Assembly, donde Christian comenzó a integrarse en el grupo de jóvenes de Central.
Como para Christian los ruidos fuertes, incluida la música, son abrumadores, le asignan asientos preferenciales, descansos cuando es necesario, abrazos y oportunidades para hablar sobre las cosas en oración. Aparte de eso, no ha tenido problemas para asimilarse.
«Christian reconoce y conoce a todos», dice Seaman. «Él habla con los niños, interactúa con ellos y, para muchos estudiantes, simplemente 'ser visto' es muy importante y Christian hace eso».
«Muchas veces, cuando ve a alguien triste, le pide orar con él. . . puedes ver cómo los rostros de los niños cambian y se iluminan instantáneamente», dice Emily Styles. «Él puede alcanzar a la gente de una manera que otras personas no pueden».
CAMBIO ESPIRITUAL
El campamento de la iglesia suele ser lo más destacado del verano de muchos niños. Este año, el campamento de la iglesia fue lo más destacado para Christian.
Junto a otros niños que experimentan sobrecarga sensorial de alguna manera, Christian participó en los servicios del campamento en una habitación del piso de arriba donde el servicio se transmitía en un gran monitor con el volumen reducido. Dice que fue durante un tiempo de oración después del servicio cuando sucedió algo extraordinario.
«Yo estaba arriba en el salón grande y justo estaba alabando a Jesús y alabando a Jesús», recuerda Christian mientras levanta los brazos. «Y luego hablé en lenguas. Fue bueno. Fue genial. Fue tan asombroso. . . Nunca hablé en lenguas, pero el Espíritu Santo vino sobre mí. . . Me encanta hablar en lenguas; Dios me llenó de grandes cosas».
Styles dice que Christian llevaba un tiempo orando para ser lleno del Espíritu Santo. Él tampoco considera que la oración se limite a la «iglesia» o a hablar en un idioma celestial como una experiencia «única».
«Oro en mi armario de oración en mi habitación, donde puedo adorar a Dios y orar para hacer grandes cosas para la gloria de Dios», dice Christian, y luego agrega: «¡Estoy deseoso de hablar en lenguas esta noche en casa!»
«Christian te dirá que tiene autismo», dice Styles. «Pero sé que no importa qué le hayan diagnosticado a alguien o por lo que haya pasado, Dios tiene un propósito y un plan para cada persona».
PERSPECTIVAS DE LOS ESTUDIANTES
Seaman dice que regularmente escucha a los estudiantes comentar sobre Christian.
«Escuché a los niños en la iglesia y en el campamento admirar cómo Christian se esfuerza al máximo en lo que hace al servir a Dios», dice Seaman. «Y he escuchado personalmente a niños decir: 'Quiero ser así (como Christian)'. Él es un gran modelo y un gran estímulo, porque es su compañero, alguien de su misma edad, y creo que los desafía e inspira».
Styles confirma las observaciones de Seaman y señala que ella también ha escuchado a adolescentes hablar y admirar a Christian.
Elli, una estudiante de último año de secundaria que ha asistido a Central toda su vida, dice que Christian ha sido una influencia positiva y edificante en el grupo de jóvenes y en su vida.
«Christian es una persona increíble, que muestra mucho de Jesús y de Dios en todo lo que hace. . . mostrándome que no importa quién seas, Jesús te ama y se preocupa profundamente por ti», dice. «No importa lo difícil que haya sido el día, siempre puedo contar con Christian. . . y sin duda, siempre pide orar por mí».
Pero en lo que respecta a Christian, lo único que quiere es que otros conozcan a Jesús de la misma manera que él lo conoce.
«Quiero que la gente siga a Dios», dice. «Quiero que estén bien y que no tengan dificultades, que lean la Biblia, que alaben a Dios y vivan para la gloria de Dios».
Foto principal: Emily Styles, Christian y el pastor Josh Seaman
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